Cuaresma

Trabajamos la Cuaresma con nuestros peques de Infantil

Presentamos esta dinámica para trabajar con los niños de infantil el tiempo litúrgico de la Cuaresma. Los 40 días previos a la Pascua son momentos especiales para revisar nuestra vida a la luz del Evangelio.

         Los niños necesitan hacer esa revisión de una forma atractiva, divertida… lo importante es que les ayudemos a ser mejores personas y, por tanto, mejores creyentes.

Dicho esto, utilizaremos  el símbolo de la arcilla/ plastilina. Este símbolo  trataremos  de que nos sugiera la idea  de “cambio”.

Actividad inicial:

Les diremos a los niños que esta mañana vamos a rezar de una forma diferente. Les proporcionaremos  un poco de arcilla o  plastilina.

Esta  actividad es muy importante motivarla en un ambiente de silencio y tranquilidad. Puede ayudar una música de fondo.


Se dejará que cada niño modele libremente en un ambiente de recogimiento.

Podemos encender una vela como símbolo de la presencia de Jesús en nuestra oración.


Una vez realizada la actividad dialogaremos con los alumnos sobre cómo se han sentido, qué ha ocurrido con el trozo de plastilina o arcilla, les preguntaremos si ha cambiado 

algo.

Una vez que los niños  han vivenciado como algo que comienza siendo tan sólo un pedazo de arcilla/ plastilina llega un momento en que se convierte en un bello jarrón, en un caracol  , en un corazón o un muñeco…gracias a las manos del que podríamos llamar  alfarero,  escultor… tomaremos esta experiencia  para introducir el tema de la Cuaresma.

La Cuaresma es un tiempo en el que Dios, si nos dejamos, trata de modelarnos para sacar lo mejor de nosotros.  Si contemplamos el trabajo de un alfarero  de un escultor vemos que necesita silencio, recogimiento ...

Eso es la Cuaresma el tiempo en el que los amigos de Jesús desde la oración tratan de ser todo lo bueno que Dios soñó para cada uno de ellos. Nosotros que hacemos…nos animamos?

Tiempo de cuaresma:

Convertirse...
Dejarse transformar por el amor de Dios...

Actividad final: Escribe o dibuja que te gustaría que Jesús modelase en ti.

Libro del profeta Jeremías:

En Jeremías 18 leemos: “Levántate y vete a casa del alfarero, y allí te haré oír mis palabras. Y descendí a casa del alfarero, y he aquí que él trabajaba sobre la rueda. Y la vasija de barro que él hacía se echó a perder en su mano; y volvió y la hizo otra vasija, según le pareció mejor hacerla”